Animales ovíparos (oviparidad), en vertebrados e invertebrados

Animales ovíparos
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Los animales ovíparos se caracterizan en que la reproducción es a través de huevos, donde se desarrolla el embrión externamente al cuerpo de la madre. La oviparidad existe en distintos grupos taxonómicos, incluyendo artrópodos, equinodermos y cordados. Los huevos pueden tener una estructura protectora, más o menos rígida, denominada cáscara, o carecer de esta.

La fecundación puede ser externa, es decir, que ocurre directamente en el medio, o interna, es decir, en el interior de la hembra. En este último caso, puede o no existir un órgano copulador.

Entre los animales ovíparos, algunos vertebrados desarrollaron una serie de membranas extraembrionarias que les permitió conquistar el ambiente terrestre, ya que las mencionadas membranas protegieron al huevo de la desecación, independizándolos así del medio acuático, son los denominados huevos amniotas.

Invertebrados ovíparos

Dentro de los animales ovíparos, los invertebrados tienen una amplia representación. Prácticamente todos los phyla de invertebrados marinos poseen representantes ovíparos. En algunos grupos (e.g. Rotifera) se presentan dos tipos de huevos, uno normal y otro llamado de resistencia o quiste, este último es capaz de entrar en diapausa, resistiendo condiciones extremas de desecación por largo tiempo, para eclosionar cuando las condiciones ambientales se hacen más favorables.

En algunos artrópodos, como cucarachas y arañas, varios embriones pueden estar protegidos por una envoltura común, que recibe el nombre de ooteca.

En los invertebrados acuáticos es más frecuente la fecundación externa, liberando hembras y machos sus gametos sexuales en la columna de agua, mientras que en el medio terrestre es más común la fecundación interna.

Ejemplo de invertebrados ovíparos con fecundación externa son: vieiras, ostras, ostiones, quitones, corales y algunas especies de crustáceos, que como mencionamos en el párrafo anterior liberan óvulos y espermatozoides (gametos sexuales) en el agua, donde ocurrirá la fecundación y luego la formación del huevo.

Por otra parte, ejemplos de invertebrados ovíparos con fecundación interna son: camarones, caracoles, planarias, cucarachas, arañas, entre otros; en los cuales el huevo se forma en el interior de la madre y posteriormente es liberado al medio, donde ocurre el desarrollo del embrión hasta la eclosión.

Vertebrados ovíparos

Existen ejemplos de animales ovíparos en todas las clases de vertebrados existentes. Los vertebrados inferiores presentan un huevo anamniota, mientras el resto presenta el denominado huevo amniota.

Animales ovíparos con huevo anamniota

El amnios es una membrana extraembrionaria que recubre ciertos huevos. Cuando esta membrana está ausente, el huevo, y los animales que poseen este tipo de huevos, se denominan anamniotas. Los únicos animales ovíparos anamniotas son los peces y los anfibios.

Al carecer de membrana extraembrionaria, el huevo no puede resistir condiciones de falta de agua, por lo cual debe desarrollarse siempre en un medio acuoso. Es denominado también huevo acuático.

Animales ovíparos con huevo amniota

A lo largo del proceso evolutivo, los reptiles desarrollaron una serie de membranas extraembrionarias, que le concedieron mayor resistencia al huevo y lo protegieron de la desecación. Este avance evolutivo permitió la independencia absoluta del medio acuático, posibilitando la colonización definitiva del medio terrestre. Los anfibios, ya se habían aventurado a explorar y habitar el medio terrestre, pero siempre debían volver al medio acuático para reproducirse, pues sus huevos no pueden ser depositados en tierra.

Son tres las membranas extraembrionarias que conformaron dicho avance:

El corion: es la membrana más externa que recubre totalmente al embrión y es semipermeable a los gases.

El amnios: es la segunda membrana, recubre al embrión casi totalmente, excepto por su parte ventral, contiene el líquido amniótico que permite el desarrollo en un medio líquido;

El alantoides: sirve como pulmón y vejiga urinaria. Esta última membrana está ubicada en la porción ventral del embrión.

Algunos autores consideran que el saco vitelino, estructura que contiene el material nutricio del embrión en desarrollo, o vitelo, constituye también una membrana, por lo cual consideran que son cuatro y no tres las membranas extraembrionarias. Al igual que el alantoides, se encuentra ventralmente en el embrión.

El huevo amniota en animales ovíparos puede ser de cáscara blanda o de cáscara dura debido a la calcificación de la misma. Según algunos autores, el primer huevo amniota fue de cáscara dura, mientras que otros sostienen que el primero fue de cáscara blanda y la aparición de la cáscara dura ocurrió en distintos momentos independientes en la evolución de los reptiles.

Peces ovíparos

Con algunas excepciones vivíparas, como el guppy, la mayoría de los peces óseos son ovíparos. Por su parte, en los peces cartilaginosos la viviparidad es más frecuente que en los peces óseos.

La forma más común de reproducción en peces es la liberación de los gametos a la columna de agua, donde ocurre la fecundación de los óvulos por parte de los espermatozoides, sin embargo, existe una variedad muy grande de estrategias y formas reproductivas que, por supuesto, incluyen comportamientos asociados a cortejos, la propia cópula y/o cuidado parental más o menos complejo.

Anfibios

Con algunas excepciones (como las cecilias, por ejemplo) los anfibios son animales ovíparos, el un huevo que carece de amnios como el de los peces. Estos huevos deben ser colocados en un ambiente acuoso para que puedan desarrollarse. Del huevo eclosiona una larva que se conoce con el nombre de renacuajo y es de respiración branquial, por lo cual debe desarrollarse en el agua.

El adulto de los anfibios generalmente es de respiración pulmonar y posee cierta independencia del agua, aunque debe vivir en ambientes húmedos para evitar que la piel se deseque.

Reptiles

Fueron los primeros tetrápodos en desarrollar el huevo amniota. Casi todos los reptiles son animales ovíparos, aunque también existe la ovoviviparidad en este grupo de organismos, la cual es tratada como viviparidad por algunos autores. El cuidado parental de los huevos está presente en algunas especies.

Aves

Todas las aves, por supuesto, son ovíparas, con un huevo amniótico de cáscara dura. Estos huevos generalmente son depositados en un nido construido por uno u ambos progenitores y empollados hasta su eclosión. El cuidado parental se extiende más allá de la eclosión, y el tiempo de cuidado de los juveniles va a variar dependiendo de la especie.

Mamíferos

Los únicos animales ovíparos entre los mamíferos pertenecen al orden Monotremata. Estos huevos son de cáscara poco firme, no calcificado como los de las aves. Son incubados por un tiempo aproximado de semana y media y posteriormente eclosiona un juvenil que debe ser amamantado por aproximadamente cuatro meses. Actualmente los únicos Monotremata existentes son los equidnas y el ornitorrinco.

Resumen sobre animales ovíparos

Resumen o esquema sobre animales ovíparos
Paradais Sphynx/CC BY 2.0

Referencias

  • C. Lira (2021).
  • C. Lira (2021).
  • C. Lira (2011).
  • C.P. Hickman, L.S. Roberts & A. Larson (2001).
  • M. Villagrán (1993).

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